Vaticano: una ruta por la Santa Sede
La ciudad del Vaticano, la Santa Sede o simplemente Vaticano como le suelen llamar todos, es una república independiente desde 1929, a pesar, de encontrarse en pleno corazón de la capital de Italia. Aquí se encuentra la residencia del Santo Padre y de muchos cardenales y obispos que trabajan en la misma ciudad o en Roma.
Además de ser el corazón de la fe cristiana, el Vaticano, es el hogar y custodio de una de las más extensas colecciones de arte del mundo. La propia basílica de San Pedro y las dependencias papales ya constituyen una obra maestra de la arquitectura, sin siquiera tener en cuenta los objetos que las decoran y los murales que las adornan.
Cuando llegas al Vaticano por primera vez es recomendable abordar el santo lugar por la vía de la Conciliazione, a cuyos lados se apilan las cientos de embajadas de los distintos países antes la Santa Sede. Al finalizar la calle, nos encontramos en la Plaza de San Pedro. Esta plaza y la basílica, a pesar, de encontrarse fuera de las murallas vaticanas se consideran territorio papal.
Acceda a la plaza, colóquese en el centro donde está la fuente con el obelisco y disfrute de la magia de la Columnata de Bernini. Aquí en esta plaza se congregan los fieles para las misas y ceremonias que oficia el Papa de turno.
A sus pies encontrará la escalinata para acceder a la Basílica de San Pedro, recuerde este es un lugar santo y como tal debe usted vestir –no puede acceder al interior con pantalones cortos o los brazos descubiertos-.
La Basílica de San Pedro ha sufrido numerosas reformas desde la pequeña iglesia construida en la época de Constantino. Por esta obra han pasado arquitectos de renombre como Sangallo, Rafael, Peruzzi, Maderno, Miguel Angel o Bernini. Aunque fueron muchos los que participaron, en la actualidad sólo podemos apreciar la magnífica fachada principal obra de Carlo Maderno, la loggia obra de Bernini y la distribución con planta de cruz latina rematada con una cúpula diseño de Miguel Ángel.
Como les decía antes, el Vaticano está trufado de obra de arte y la basílica no es una excepción. Las puestas de bronce del pórtico de la entrada son obra de Antonio Filarete, y en el interior pueden ver la Scala Regia y el baldaquín de Bernini, "La Pietá" de Miguel Angel, "San Pedro en el Trono" de Arnolfo di Cambio, Nicho de Pallia un mosaico del siglo VI, "Dalmática", la "Cruz del Emperador Justino II" y el "Sarcófago" todas de Giunio Basso, la maqueta del Templete de San Pedro in Montorio de Bramante... y mucho más.
El recorrido de la Basílica de San Pedro culmina con la ascensión a la cúpula desde donde se puede ver la hermosa ciudad de Roma en plenitud.
Si desea acceder a los museos vaticanos deberá madrugar porque las colas son enormes y se hacen desde las primeras horas de la mañana. La entrada a los museos se encuentra en la vía Stefano Porcarini, en una entrada de la muralla en la zona norte.
En los asombrosos museos vaticanos se encuentran una de las colecciones de arte más esplendidas y voluminosas del mundo. Las malas lenguas dicen que en los sótanos y archivos del Vaticano se preservan obras que no se exponen y se creen perdidas, pero ni falta hace que las expongan porque un día le sabrá a poco para ver toda esta maravilla.
Todos los visitantes de los museos, pasan primero al famoso Patio de la Piña y de allí a una especie de distribuidor donde usted puede escoger que parte ver primero o que dejarse para el próximo viaje. He aquí sus posibilidades:
- El Museo Gregoriano Egipcio creado en 1839 por el Papa Gregorio XIV y que cuenta con una colección de momias, sarcófagos y objetos traídos de excavaciones en el país árabe de incalculable valor histórico y artístico.
- El Museo Pío-Clementino dedicado a exponer y estudiar la escultura griega y romana. Aquí podrán disfrutar de piezas como "Juno Sospita", la "Amazona Herida", el "Busto de Trajano", la "Ariadna Dormida", el "Apolo de Belvedere", el "Hermes", la "Estatua de Diosa", el célebre grupo del "Laoconte" y el "Heros de Centocelle", entre otros.
- El Museo Gregoriano Etrusco donde no deben perderse las famosas Galería de los Candelabros, la Galería de los Tapices y la Galería de los Mapas.
- Las estancias de Rafael, donde el famoso artista se alojaba mientras trabajaba para el Papa Julio II en 1508. Todas las habitaciones están decoradas por el propio pintor y después se pasa a una zona expositiva en el segundo piso donde se exponen las obras del pintor.
- La Capilla de Fray Angélico completamente decorada con frescos del pintor toscano.
- El apartamento de los Borgia, que incluye la visita a la famosa torre de los Borgia.
- La Pinacoteca Vaticana donde hay cientos de obras memorables.
- La Capilla Sixtina es la pieza principal del recorrido. Esta estancia de oración fue encargada por Sixto IV a Miguel Ángel y consitutuia una zona privada de oración para el Santo Padre. Sin embargo, en la actualidad y tras su restauración de está plagada de turistas que dificultan el disfrute de los magníficos fresco.
Los Museos y Galerías del Vaticano tienen el siguiente horario: de 9.00 h a 14.00 h. de lunes a sábados (en el período de Pascua desde el 1 de julio al 30 de septiembre, de 9.00 h a 16.00 h.). Cerrado los domingos excepto el último de cada mes, con entrada gratuita de 9.00 h a 13.00 h.
Aunque más alejado el Castillo de San Angelo es también parte del Vaticano. Este edificio en estado semiderruido era la prisión de los detractores del Papa. Su construcción data del 130 d.C. y se encuentra unido por un pasadizo subterráneo con la Santa Sede. Puede ser interesante visitar este lugar histórico, pero sólo si tiene muchos días, porque no me parece demasiado interesante. /// Texto escrito por Alfredo.
|
