Venecia: de viaje en la Serenísima república
Como si del Orient Express se tratará después de Paris te embarcaremos en un viaje a la tierra de la fantasía: viajaremos a Venecia. Pasar un fin de semana en esta maravillosa ciudad, cuna del urbanismo y del carnaval, puede ser una experiencia realmente muy interesante.
Todo el mundo piensa que es una ciudad romántica, pero para mí es mucho más que góndolas y viajar abrazados en ellas. Venecia te da la oportunidad de mirar de cerca uno de los imperios más ricos e importantes del mundo antiguo, y lo que es más maravilloso, esa simbiosis de los estilos orientales con el más puro y refinado barroco italiano.
Comencemos el viaje por la estación Venecia-Santa Lucia. Muchos de los visitantes de esta isla de encanto, deciden hospedarse en Mestre (tierra firme) por la conveniencia de precios. Mi recomendación es que no lo hagas. Se debe estudiar cuidadosamente el precio del tren Mestre-Venecia y del vaporetto de cada día, para saber si es conveniente hospedarse en tierra firme. La isla cuenta con numerosos albergues y hoteles de precios medianamente razonables. Si llegas a la estación con tu equipaje te recomendamos que tomes el vaporetto hasta tu albergue, ya que Venecia con sus puentes y escaleras puede llegar a acabar con tus maletas y tu energía.
Venecia, la isla, está dividida en sestieres, denominados así porque hay seis en la isla. Haremos el recorrido de este fin de semana maravilloso por sestieres a lo largo de cada orilla del gran canal.
Comencemos por la margen izquierda, sin cruzar el famoso Ponte degli Scalzi o Ferrovía, construido en 1934. Estamos en el sestiere de Cannaregio, famoso porque allí se alberga el antiguo barrio judío de la isla. Si te interesa podrás visitar su sinagoga y recorrer sus calles de tiendas muy atractivas. También aquí están el Palazzo Labia y Ca D’oro. Este último y maravilloso edificio restaurado en 1995, del gótico florido, no conserva su fachada toda de oro a la que debe su nombre, pero aún tiene esa magia de la Venecia gótica digna de ser vista.
Ahora pasamos al sestiere de Castelo, lleno de iglesias espectaculares que no debes dejar de visitar. Mi recomendación personal San Zaccaria, San Zipolo y Santa María del Miracoli. En Castelo también se encuentra el famoso barrio del Arsenal, llamado así porque aquí se encontraba el antiguo polvorín y el puerto, donde se alojaba la naval que defendía la isla. Cruzando todo Castelo llegarás a la rambla que bordea el Canal de San Marco, así encontrarás al famoso Ponte dei Sospiri, justo en el límite de este sestiere con el de San Marco. Universalmente conocido, este puente debe su nombre, a los suspiros y lamentos de los prisioneros que lo cruzaban y contemplaban desde allí por última vez, la laguna antes de ser ejecutados. Yo que siempre creí que era un nombre romántico, que horror!!!
Si quieres visitar el puente de los suspiros deberás visitar el Palazzo Ducale. Lo recomendamos, te dará una idea magnífica de la historia de Venecia y podrás observar maravillosas obras de arte y arquitectura. El Palazzo Ducale era la antigua residencia del Dux o gobernante de Venencia, obispo de la iglesia y gran personalidad.
Ahora que ya estás cansado, puedes darte un paseo por las calles del sestiere de San Marco y buscar un buen lugar donde comer. Como ya comprobarás cuando estés en la isla, dar direcciones aquí es imposible, pero por las calles aledañas al Campo de San Silvestro y San Polo, una vez cruzado el Puente de Rialto hay cantidad de maravillosos restaurantes con precios solidarios ( un promedio de 20 euros por un menú completo con postre y vino). Mis recomendaciones son: las ostrerias, que son muy famosas, donde sirven marisco de la laguna y si lo logras encontrar la pizza y el carpaccio del Antico Panifichio son lo máximo.
Piazza San Marco
En el lugar en el que se encuentra la única plaza de Venecia, se extendía antiguamente el huerto del monasterio de San Zaccaria. En el año 832, cuando finaliza la construcción de la primera basílica de San Marco, la plaza recibe el nombre de Piazza de San Marco. Hacia 1160, toma su forma actual y definitiva. El espacio trapezoidal de 176 metros está limitado al norte por las Procuradurías Viejas, reconstruidas en el siglo XVI y al sur por las Procuradurías Nuevas. En el lado Oeste el Ala Napoleón o Novísima, construida por orden del emperador a principios del siglo XIX y por el Este por la famosa Basílica de San Marco.
Este maravilloso ejemplo de la arquitectura del Bizancio, la basílica de San Marco, fue edificada después del milagro de la recuperación de los restos del “santo”, unido en historia a Venecia durante siglos. Las cinco cúpulas bizantinas del siglo XII están rematadas por una linterna y una cruz. Su silueta se recorta sobre el cielo dando a cualquier hora del día un espectáculo singular descrito por miles de artistas a lo largo de la historia.
En el conjunto de San Marco podrás visitar también: La Galería y Museo Marciano dentro de la misma Basílica, las Procuradurías Nuevas donde se ubica El Museo Correr, la Biblioteca Marciana, El Museo Arqueológico y la Torre dell’Orologio (actualmente en restauración).
Finalmente visitaremos el Campanile. La torre actual es de siglo XX, pero la reconstrucción, realizada después que el antiguo se cayera por efectos de un terremoto, se hizo sobre el modelo original de Bartolomeo Bon. De aspecto macizo “ el señor” como le dicen aquí y de planta cuadrada que se eleva 96 metros sobre la plaza, nos ofrece la mejor vista de toda la laguna y de la isla.La Loggetta Sansoviana, realizada entre 1537 y 1549, es el pequeño edifico que sirve de entrada al campanile. Allí podrás comprar las entradas y tomar el ascensor rumbo el mirador.
Llega la noche, tómate una rebanada de pizza en alguna de las maravillosas pizzerías de la zona de Rialto y luego vístete de gala para tomar un cóctel en los cafés de la Piazza San Marco.
En el día dos recorreremos los sestieres de San Croce, San Polo y Dorsoduro. Partimos de nuevo desde la estación del tren, pero esta vez cruza el Ponte degli Scalzi. En Santa Croce encontrarás el alojamiento más barato dentro de la isla y en San Polo las mejores tiendas, los restaurantes con mejores precios y deliciosas heladerías.
Por las callecitas y sin perderte, llegarás a la Iglesia del Frari, en el campo dei Frari. Es un edificio de dimensiones monumentales, perteneciente a la orden de los franciscanos menores; en su interior presenta una interesante colección de mausoleos y de esculturas de gran renombre.
Continuemos nuestro recorrido por las callejuelas de San Polo, precisamente hasta el campo principal del sestiere, que lleva su mismo nombre. Aquí durante el verano hay un cine al aire libre, donde se pasan películas de cartelera. Puede ser una experiencia interesante asistir a una función a cielo abierto.
Calles tras calles y después de visitar las tradicionales tiendas de papel artesanal y cristal de Murano, cruza el Puente de Rialto. Este puente es el más grande y el más concurrido de todos en la isla, a cada lado tiene tiendas muy bonitas. Fue construido en 1591 y es el sexto que se edifica en el mismo lugar. Antiguamente, los locales del puente eran solo bancos pero ahora hay de todo. Cruzando este puente volvemos al sestiere de San Marco, ahora visitaremos lo que nos ha quedado pendiente aquí, no sin antes pasar de nuevo por la Piazza y volver a contemplar esta maravilla. Si quieres ver un espectáculo maravilloso te recomiendo contemplar un amanecer sentado en las arquerías de la Novissima y ver como el sol al salir dora las cúpulas de la basílica e ilumina los magníficos mosaicos de sus fachadas, no podrás olvidarlo jamás.
De la piazza y caminando por las calles que salen de la cara oeste de ésta, encontrarás el famoso Teatro de la Fenice (Fénix). Actualmente en restauración, pero será inaugurado para la primavera del 2004, así que solo lo podrás ver por fuera, pero es tan hermoso que solo eso vale la pena. El terrible destino de este edifico incendiado dos veces tiene mucho que ver son su nombre, el primero fue inaugurado en 1792 y el segundo en 1836, obra de Giannantonio Selva. Muy cerca del mítico teatro encontrarás la famosa Scala del Bobolo, el elemento más destacado del antiguo Palazzo Contarini. En italiano bobolo quiere decir caracol. Ésta escalera de estructura de caracol es muy ligera y en ella se unen a la perfección el estilo gótico y el renacentista.
Del Bobolo a Santo Stefano, echa un vistazo a este maravilloso edificio y cruza el Ponte de la Academia, el único sobre el gran canal construido en madera. Estamos en Dorsoduro, mi sestiere favorito. Visitaremos primero la Galería de la Academia, donde se aloja la colección más grande e importante de todo el Veneto. Aquí apreciaremos espectaculares piezas del arte veneciano. Saliendo de la Academia hacia el este, encontraremos la entrada del Museo Peggy Gugenheim: maravilloso, de corto recorrido y curaduría impecable. Les recomiendo este lugar es extraordinario, da una idea de cómo vivió esta ejemplar señora rodeada de lo más vanguardista del arte de su época. Podrás apreciar obras de Magritte, Calder, Erns, Kandisky, Braque, Picasso, Mondrian, Miró, De Chirico, Dalí o Pollock. El jardín bordado con esculturas de Giacometi y otros es un lugar inolvidable. Les recomiendo la tiendita del museo, que cuenta con una variada cantidad de objeto de diseño y posters de la colección.
Siguiendo la misma dirección que antes (hacia el este) y desde la salida del museo llegarás a la magnifica y famosa Iglesia de la Salute. El imponente volumen blanco de esta iglesia del arquitecto Longhena se puede apreciar desde lejos. Se caracteriza por sus volutas llamadas orecchioni (orejones). Se construyó para cumplir una promesa realizada por el Dux, con el fin de conjurar la epidemia de peste que diezmó la ciudad en 1630. Por todo esto, la iglesia la preside Santa Maria reina del mar con el bastón de la mar cedida por Venecia, personaje legendario de la mitología.
Saliendo por la majestuosa escalera de la Salute y rumbo al este te encontrarás con la Dogana de Mar. Antiguamente las mercancías se descargaban en esta especie de proa, formada por el extremo del barrio de Dorsoduro. La descarga se realizaba tras pagar los arbitrios y de allí viene el nombre de Punta de la Aduana. La construcción actual es de la segunda mitad del siglo XVII y está rematada por una torre en cuya cima dos atlantes sostienen el peso del Globo y una alegoría de la Fortuna. Desde la aduana la panorámica de San Marco es muy buena, digna de fotografía. Sigue el recorrido por la orilla de la punta y del otro lado encontrarás Zattere donde recomiendo se sienten a tomar un aperitivo en las terrazas flotantes sobre la laguna, un final perfecto para este viaje.
Vaporeto Alilaguna: son los barcos que van desde el aeropuerto hasta la Piazza San Marco. Tienen un costo de 9,81€ por viaje y un recargo de 1,03€ por pieza de equipaje.
Vaporeto ACTV: es el trasporte marítimo interno de la laguna, dentro de la misma isla de Venecia y con las otras islas. El precio de un boleto es 3,09€ dentro de la isla de Venecia.
Basílica de San Marco: cuenta con visitas guiadas con duración de una hora. En Julio y Agosto se realizan con una frecuencia de media hora. Tanto la Basílica como el Museo Marciano, Pala d’Oro y el Tesoro tiene un horario de 9:00 a.m. a 17:00 p.m. Cada una de estas atracciones tiene una entrada pro separado y un precio diferente, salvo la basílica de entrada gratuita.
Campanile de San Marco: Abierto de Abríl a Octubre de 9:30 a 18:00 y de Octubre a Marzo de 9:30 a 16:00. Cerrado todo el mes de Enero. Entrada de estudiante 6€.
Museos de la Piazza San Marco: Palazzo Ducale, Museo Correr, Museo Arqueológico Nacional, Sala Monumental y biblioteca Nacional Marciana con un horario de Abril a Octubre de 9 a 19 y de Noviembre a Marzo de 9 a 16. La entrada de estudiante vale 5,16€.
Las Iglesias: normalmente todas cumplen con el mismo horario de 9 a 18, salvo los domingos y festivos que abren de 9 a 13. Algunas cobran entradas como la Iglesia del Frari que vale 1,55€.
Fundación Peggy Guggenheim: abierta de 11 a 18 todo el año. Cerrado los martes y el 25 de Diciembre. Abre todos los festivos nacionales. La entrada general vale 8€ y la de estudiante 5€.
Islas de Venecia
Las islas de Venecia ofrecen su propio encanto. Giudecca tiene un trazado regular con numerosos espacios verdes salpicados por edificios de interés como la Iglesia del Redentor, obra maestra de Palladio (edificada después de su muerte), la Iglesia y el Monasterio de San Giorgo Magiore, ambas con obras de Tintoretto o el Palacio Cini. Murano, compuesta por cinco pequeñas islas, conocida mundialmente por la excelente calidad del vidrio que fabrican y en la cual es de obligada visita el Museo de Arte del Vidrio que ofrece una muestra de vidrios de todo el mundo aunque con especial hincapié en el veneciano.
En Burano se pueden adquirir preciosos encajes, San Francisco en el Desierto destaca por la soledad que ofrece y por su eremitorio del siglo XIII, Torcello cuenta con una importante Catedral del siglo VII con estupendos mosaicos, una iglesia románica, Santa Fosca, y el Museo del Estuario instalado en dos palacios del siglo XIV.
La más famosa de todas las islas es el Lido ya que en ella están situados el Casino Municipal, el Palacio del Cine, sede de la internacional Mostra de Venecia, y el Hospital del Mar. Como curiosidad, la isla de San Lázaro de los Armenios, que fue escogida por una religión oriental para instalar su comunidad (llevan allí desde el siglo XVIII). /// Texto escrito por Alfredo.
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