Turismo en Burgas
Burgas es considerada el centro de la región sur de la costa del Mar Negro de Bulgaria y el principal puerto de la región.
La ciudad es también la cuarta más grande del país, situada en la parte más occidental de la bahía de Burgas, en una península rodeada por tres famosos lagos, el Bourgasko, el Atanasovsko y Mandrensko.
Aunque sus monumentos históricos y culturales no pueden competir con los de su ciudad rival, Varna, al ser menos concurrida en los meses de verano y poseer encantadores cafés y restaurantes, es un lugar agradable para descansar, así como un punto de partida ideal para recorrer la costa sur.
Burgas también cuenta con una larga playa y un parque marino junto a la misma. La temporada de playa se inicia a principios de junio, cuando la ciudad se llena de turistas, y dura hasta finales de septiembre.
La ciudad de Burgas está construida sobre la base de las antiguas ciudades de Pirgos, Kastiacion, Skafida y Rossokastron. En 1903, cuando se abrió la estación de tren, comenzó una expansión del área y el florecimiento de la industria y el comercio en la región.
Hoy en día, Burgas se ha convertido en un excelente destino turístico gracias a su clima templado, magníficas vistas al mar y vibrante centro comercial.
Entre las atracciones culturales se encuentra el Museo de Historia del Distrito, que abrió sus puertas en 1925. Las salas de exposición exhiben una serie de piezas que se remontan a la época de los romanos.
Mientras el Museo Etnográfico ofrece una mirada a la ropa, accesorios, tejidos y bordados del pasado, el Museo de la Ciencia y la Naturaleza presenta más de 1.300 variedades de insectos, peces, reptiles y plantas, incluyendo especies amenazadas.
No dejes de visitar la Galería de Arte, que inaugurada en 1945 cuenta con exposiciones de estatuas, esculturas y pinturas de artistas búlgaros.
Los amantes del arte sacro disfrutarán de una visita a la Catedral de San Cirilo y Metodio, popular gracias a sus maravillosos frescos y su artístico altar de madera. También la Iglesia Armenia, construida en 1855, es digna de una visita.
Quienes prefieren el teatro y la ópera no se sentirán defraudados de pasar unas vacaciones en Burgas, ya que la ciudad cuenta con una Sala Filarmónica, una Ópera, un Teatro y un Teatro de Títeres.
Si no te importa dar un corto paseo desde el centro de la ciudad, visita el Jardín del Mar, situado en una colina con vistas al Mar Negro. El parque está lleno de cosas para ver y hacer, desde un casino hasta un parque zoológico y un teatro al aire libre que alberga el Festival Internacional de Folklore que se celebra anualmente.
A la hora de comer, encontrarás que Burgas tiene muchos restaurantes y cafés que sirven cocina tradicional búlgara o serbia, generalmente a un precio razonable e incluyendo aperitivo, entrante, plato principal y postre.
Si buscas un lugar bueno y barato, te recomendamos el restaurante Grolsch, que basado en una popular cerveza local, sirve una amplia variedad de comidas que van desde calamares hasta albóndigas.
A la noche encontrarás un gran número de bares y discotecas abiertos hasta altas horas de la madrugada, con variadas propuestas que van desde el karaoke hasta la música en vivo y pistas donde bailar al ritmo de la música de buenos DJ.
Si quieres disfrutar de música en vivo dirígete a Party Club. De lo contrario, las discotecas de moda son Alibi, Jim Beam, Roxy Club, Silver Club, Shock, Cool Brother y Excess.
Si tienes tiempo de recorrer los alrededores de la ciudad, 20 kilómetros al norte de Burgas se encuentra Pomorie, un lago rodeado de minas de sal cuyas aguas contienen un alto nivel de minerales.
También el lago Atanassovo se encuentra en la misma zona y es hogar de una gran reserva natural, donde puedes disfrutar del entorno y observar muchos peces y aves como pelícanos, ibis, garzas y más. /// Texto escrito por Alfredo. |
