Viajes a Liverpool
Situada en una amplia curva del río Mersey, propensa a nieblas, tormentas marinas, lluvias largas y con uno de los puertos más grandes del mundo, Liverpool es el sueño de todo marinero.
Segunda ciudad más importante de Inglaterra después de Londres, se trata de un lugar cosmopolita y diverso que se prepara para un futuro excitante, tomando el lugar que le corresponde como una de las principales ciudades de Europa.
Famosa por su música, equipos de fútbol, cuna de personalidades famosas y vida nocturna, la ciudad ha evolucionado desde los días felices de los Beatles hasta convertirse recientemente en Capital Europea de la Cultura 2008, un prestigioso premio que la ubica en el mapa como una gran destino turístico a visitar.
Lo cierto es que Liverpool es un lugar ideal de vacaciones, no solo para los aficionados al fútbol y los fanáticos de los Beatles, sino también para cualquiera que desee disfrutar de un lugar mundano y vibrante.
Buscando un hotel de precio accesible, céntrico y con buenas comodidades, decidimos alojarnos en el Express By Holiday Inn Liverpool Albert Dock, alojado en el pabellón Britannia del Albert Dock y con excelentes vistas a la bahía.
Algo que nos llamó la atención es que la ciudad ha sido declarada Patrimonio Mundial de la Humanidad por la UNESCO, uniéndose a Edimburgo y Bath como las únicas ciudades del Reino Unido distinguidas con dicho honor.
Liverpool es una ciudad de diversa y, a pesar que cuenta con la mayor cantidad de edificios georgianos de la nación, también alberga el más antiguo Chinatown (Barrio Chino) de Europa, así como un sorprendente número de edificios victorianos y atracciones de clase mundial.
Los apasionados de la historia encontrarán en Liverpool una serie de sitios históricos de la Segunda Guerra Mundial, como la iglesia gótica de San Lucas, que fue bombardeada en 1941 hasta quedar en ruinas y aún se conserva tal como quedó.
Entre los lugares que visitamos se encuentran las dos espectaculares catedrales, varios museos de arte y el Centro de Conservación, donde admiramos una fascinante exposición sobre restauración de arte.
La Catedral Anglicana de Liverpool se yergue en el corazón del centro de la ciudad, orgullosa de su arquitectura espectacular, mientras que la Catedral Metropolitana de Cristo Rey llama la atención por ser un elegante edificio circular construido a mediados del siglo XX.
El Albert Dock, el mismo edificio que alberga el hotel donde nos alojamos, también contiene una sucursal de la Tate Gallery y el Museo Marítimo, con una sección especial dedicada a "los emigrantes al Nuevo Mundo."
Si te gustan los museos, no dejes de ver el Museo de la Vida de Liverpool, donde encontrarás muchos objetos de época, incluidos recuerdos musicales y deportivos.
La Tate Gallery de Liverpool, una de las más populares galerías de arte de la ciudad, acoge una serie de exposiciones temporales a lo largo del año, así como una amplia colección permanente de arte moderno.
Para los fanáticos, Liverpool es sinónimo de los Beatles. Nosotros tomamos el Magical Mystery Tour, un viaje de dos horas en minibús que recorre los principales lugares de los “genios de Liverpool”.
La gastronomía ha florecido en los últimos decenios con nuevos restaurantes apareciendo por doquier. Al ser hogar de la comunidad china más antigua de Europa, ofrece un gran número de restaurantes chinos, aunque también encontrarás muchos otros tipos de restaurantes étnicos.
Para probar algo tradicional te recomiendo el restaurante The Monro, en 92-94 Duke Street, un típico gastro-pub británico con buenos platos de conejo y jabalí, y el delicioso scouse (una especie de estofado marinero), todo bien regado con una pinta de cerveza.
Al anochecer, el centro de la ciudad en los alrededores de Victoria Street es uno de los sitios más populares gracias a sus buenos bares y clubes. El pub más espectacular es el Philharmonic, en Hope Street, con caoba por todas partes, techos rococó y - oficialmente - los mejores baños en Inglaterra. /// Texto escrito por Alfredo. |